Este proyecto corresponde a la implantación de la nueva sede central de una empresa líder en el sector energético, con presencia destacada tanto a nivel nacional como internacional. En esta ocasión, la empresa decide mantenerse en su actual campus, trasladándose a un edificio recientemente rehabilitado dentro del mismo complejo. Ocupan tres plantas de iguales dimensiones, sumando aproximadamente 2.800 m². Las plantas presentan una geometría semicircular, con un núcleo de comunicaciones central adosado a una de las fachadas.
La estrategia espacial se organiza en torno a un eje longitudinal que actúa como “tallo”, a partir del cual se despliegan distintos volúmenes y espacios, las “hojas”, que estructuran el proyecto. El proyecto se desarrolla con una mirada integral hacia la sostenibilidad, incorporando criterios de eficiencia energética, selección de materiales y diseño personalizado. Lejos de soluciones estandarizadas, apostamos por una aproximación artesanal, trabajando con carpinteros locales. La integración del mobiliario es parte fundamental del proyecto.
Ignis N12 materializa una visión contemporánea de espacio de trabajo: eficiente, sostenible, fluido y profundamente humano. Un entorno que se adapta al ritmo de una empresa en constante evolución y que convierte su arquitectura en reflejo de su identidad.
